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NUTRISCORE: etiquetado nutricional

24 octubre 2020

Si habéis oído hablar del nutriscore sabréis que es el sistema de etiquetado nutricional frontal elegido en nuestro país para facilitar información nutricional más clara a los usuarios.

Nos aporta información sobre la composición nutricional del alimento mediante una escala de 5 colores y niveles con letras que indican el producto más favorable en términos nutricionales (letra A y color verde) y el menos favorable (letra E y color rojo). 

Está basado en un algoritmo que lo que hace es calcular la calidad nutricional del producto valorando los aspectos desfavorables como el contenido en calorías, en azúcares simples, grasas saturadas y sodio y por otro lado los aspectos que sí son favorables, porcentaje de frutas y verduras, contenido en proteínas, aporte de leguminosas y contenido en fibra por 100 gramos o ml del producto. Así, según el conjunto de factores que tenga cada alimento se realiza una valoración de su calidad nutricional.

Su objetivo es comparar productos de la misma categoría, de forma que sea más sencillo elegir la opción más saludable de un mismo grupo de productos.

Como decíamos, el nutriscore penaliza o da menos puntos a categorías con alto contenido en grasas, azúcares y sal. Alimentos como bollería industrial, aperitivos tipo snacks o embutidos. El nutriscore lo encontraremos en productos procesados envasados. No lo encontraremos en productos frescos (carnes, pescados, frutas y verduras, legumbres), productos elaborados con un solo ingrediente, café, té, infusiones, bebidas alcohólicas y alimentos directamente suministrados por el fabricante.

Como aspecto positivo aceptamos la facilidad de interpretar de un simple vistazo la calidad nutricional que tienen los productos con nutriscore, y además que puede llegar a mejorar la calidad de la compra que hacemos. 

Como aspecto negativo señalamos que el nutriscore no hace diferencia alguna entre el perfil de tipo de grasas (saturadas o no) que tiene cada producto. Hay alimentos muy saludables pero muy densos nutricionalmente hablando, como puede ser el aceite de oliva, que lo califica con una puntuación bastante negativa porque 100 gramos de este producto nos aporta una cantidad calórica muy elevada. Pero tenemos que tener en cuenta que una persona de media no consume raciones de 100 ml de aceite de oliva y que la grasa que nos aporta una ración real de aceite de oliva es 100% saludable.

Por el contrario encontramos productos procesados mucho menos saludables con una puntuación de nutriscore mucho más alta y buena que la del aceite de oliva. Porque por 100 gramos de producto aportan muy pocas calorías o tienen bajo contenido en azúcares o grasas, como puede ser por ejemplo la coca cola zero.

En conclusión podemos decir que el sistema de etiquetado nutricional es una muy buena iniciativa a la hora de intentar que la población general se preocupe por una alimentación más saludable y la industria por elaborar alimentos de mayor calidad nutricional, pero tiene muchos aspectos que mejorar para que la valoración nutricional de cada producto sea mucho más individual.

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